Discurso de Julio Borges en el Comité Político Nacional Fernando Albán
Buenos días justicieras y justicieros,
Es una gran noticia para toda Venezuela y su futuro de libertad y de justicia la realización de este comité político.
Tengo el honor de hacer un breve balance antes de proceder a la elección federal de nuestra nueva Junta de Dirección Nacional y nuestras nuevas autoridades en el marco de un proceso de re organización y legitimación de Primero Justicia que luego de más de 10 meses de trabajo y la votación de más de 100 mil justicieros, culmina el día de hoy. Tenemos que sentirnos orgullosos de lo que hemos construido y seguiremos construyendo para Venezuela.
Queridos justicieros, al mismo tiempo que Primero Justicia se reúne en este comité político, hay un debate muy importante en las Naciones Unidas sobre Venezuela.
Desde hace tres años las naciones unidas crearon un grupo de trabajo llamado la “misión de verificación de hechos”, la cual está compuesta por 22 países y se ha encargado de estudiar detalladamente la violación de derechos humanos contra la disidencia política en Venezuela, (Miguel Pizarro ha trabajado arduamente en que este grupo de Naciones Unidas tenga vida). Esta semana este grupo de trabajo presentó un nuevo documento de 122 casos de víctimas que fueron sometidas a tortura, violencia sexual y/u otros tratos crueles perpetrados por agentes de la policía política del régimen.
El informe narra cómo prácticas de tortura como asfixia con barriles de agua y bolsas plásticas, descargas eléctricas, golpes en las costillas, privación de alimentos y la luz natural, violencia sexual y amenazas de muerte se han hecho constante dentro de la policía política. En dicho documento también se narra el caso de militares detenidos que se ha visto obligados a declarar contra opositores o compañeros de la FANB para incriminarnos en supuestos conspiraciones militares.
También la Misión de Determinación de Hechos documentó el papel de Cuba dentro de este sistema de torturas, pues en muchos casos los funcionarios cubanos están dentro de los organismos de inteligencia venezolano practicando torturas y además. es en Cuba donde los torturadores reciben formación.
El 8 de octubre del año 2018 nuestro hermano Fernando Albán fue víctima de esta máquina de muerte, venía aterrizando en Venezuela, estábamos juntos, precisamente en la Naciones Unidas, con otros justicieros hablando con todos los países posibles para que el régimen fuera desconocido a partir del año 2019 cuando tocaba la juramentación presidencial.
En nombre de Fernando Albán, y su familia que aquí nos acompaña, y en nombre de las miles de víctimas que el valiente informe de Naciones Unidas documenta es que hoy nos reunimos para ratificar al mundo, que nuestra lucha es por una Venezuela de Justicia y dignidad, donde podamos vivir libres y sin miedo, por eso hemos bautizado, este Comité Político Fernando Albán, para tener presente cada segundo que nuestra lucha es mucho más que una lucha política, se trata de vencer el mal con la justicia y con la democracia. Ese es el tamaño de nuestro desafío y que hoy ratificamos que lo vamos a lograr.
Pero para lograrlo, debemos comprender no solo que luchamos con la más cruel de las dictaduras que ha vivido Venezuela, sino también que se abre hoy un nuevo capítulo de lucha. Así como Primero Justicia lideró las elecciones presidenciales del 2012 y 2013, el triunfo parlamentario del 2015, las leyes sociales del 2016, como la ley de propiedad de la GMVV, las protestas y el apoyo internacional del 2017, y el desconocimiento mundial al régimen en el año 2108, ahora le toca de nuevo a Primero Justicia liderar esta nueva etapa y lograr el triunfo definitivo del bien sobre el mal.
Lo que logramos todos esos años en apoyo del pueblo, en legitimidad electoral con la AN, en apoyo internacional a la causa democrática, no fue correctamente manejado por quienes, el azar, les colocó en esa responsabilidad. Por ello, nos toca de nuevo ponernos de pie, tomar fuerzas como Primero Justicia y volver a liderar una alternativa democrática que, ya no es vista como un instrumento útil para los venezolanos. De ese tamaño también es nuestro desafío.
Nos debe llenar de orgullo, a todos los justicieros, en Venezuela y en todas partes del mundo que, en medio de una feroz dictadura que además ha empobrecido y corrompido a buena parte del país, Primero Justicia ha seguido sin descanso luchando, creciendo, multiplicando su liderazgo en la calle, los barrios, las universidades, la sociedad civil y en todos los rincones de nuestra patria. Todos los días yo me cargo de energía al ver en las redes sociales decenas de actividades y miles de justicieros activados en sus comunidades, recogiendo útiles y uniformes escolares, luchando por el salario de los trabajadores, desarrollando comedores populares, haciendo reuniones y congresos programáticos, nuestros jóvenes liderando la mayoría de las universidades de Venezuela, recorriendo nuestros barrios y escuchando a la gente, organizando torneos deportivos, dando clases para los estudiantes de bachillerato para apoyarlos, formando en valores políticos a nuestros militantes, luchando por los derechos de la mujer y la familia,, haciendo visitas casa por casa, defendiendo los derechos humanos o el medio ambiente, publicando revistas y libros de debate político, así como siendo los reconstructores de la golpeada unidad democrática; igualmente, emociona ver a los justicieros más allá de nuestras fronteras tocando las puertas de parlamentos y partidos políticos en el mundo, creando organizaciones para nuestros migrantes, acompañando y ayudando a la diáspora venezolana, proponiendo ideas, luchando por las condiciones electorales,
Por ello, para seguir creciendo y cumpliendo con el tamaño de nuestras responsabilidades, Primero Justicia ha decidido reformar su estructura, crear más espacios de tareas políticas, como la presidencia del partido y 5 vice presidencias, delimitar áreas de acción con x secretarias, x coordinaciones, el estado 25 para organizar a más de 70 mil justicieros en 190 ciudades del mundo, dinamizar su junta de dirección nacional y convertir a su comité político federal, en el epicentro político y estratégico de nuestro movimiento.
No existe en Venezuela un movimiento con la espiritualidad, los valores, la organización, la capacidad de trabajo y la mística de Primero Justicia.
En nombre de miles y miles y miles de justicieras y justicieros que todos los días se vuelcan como un solo cuerpo, a la milagrosa tarea de construir el mejor partido político de Venezuela, al mismo tiempo que luchan contra la peor dictadura de nuestra historia, quiero hacer una reflexión a las cabezas de Primero Justicia que estamos a puntos elegir en este Comité Político, por favor presten todos atención : la construcción de un liderazgo presidencial para un partido político tiene dos caminos excluyentes, primera opción, o se aprovecha esa dinámica para crecer, energizar, lanzar propuestas e ideas, visitar todos los rincones de Venezuela y vencer la dictadura con un líder y candidato de Primero Justicia o segunda opción, perdemos el tiempo en el desgaste, la rivalidad, el mirarse el ombligo, el hablarse solos al espejo, el cálculo personal, o la vanidad mientras 35 millones de Venezolanos estamos pasando el peor momentos de nuestras vidas. Como justiciero, como venezolano, como fundador de este partido quisiera transmitir que Venezuela no nos está pidiendo, nos está EXIGIENDO, que estemos a la altura de la tragedia histórica que atraviesa nuestra Venezuela.
Es imposible ganar las grandes ligas, si la discusión es sobre el uniforme del equipo, y no nos unimos todos a construir la cancha, las gradas, las reglas, el entrenamiento y por supuesto el triunfo. Eso SOLO se logra, si quienes aspiran a ser el candidato o candidata de Primero Justicia asumen que solo la opción 1 es la que este partido acepta: aprovechar la dinámica candidatural para crecer, energizar, lanzar propuestas e ideas, visitar todos los rincones de Venezuela y vencer la dictadura con un líder, más que con un candidato.
El dia de hoy al inaugurar esta nueva organización, esta nueva etapa y este nuevo ímpetu de lucha, queremos abrazarnos y seguir adelante unidos, en el momento más oscuro y difícil de todos estos años de lucha, para decirle a todos los venezolanos, en todas partes del mundo, que cuenten con que la justicia será lo primero en Venezuela y que nadie deberá nunca más morir en la historia de Venezuela, como sucedió con nuestro hermano Fernando Albán quien cada segundo nos guía hasta la libertad.